I
Mis heridas no están en el aire,
se transfieren de rostro a rostro
de un reflejo a una calle.
Mi herida, mis plurales de sangre.
II
Nosotros no conocimos el peso de la pólvora sobre el agua
ni el rumor terrestre de las armas.
Nosotros, dejamos de ser sílaba por sílaba
libro, recuerdo, militante, poesía.
- Namur Valencia -
No hay comentarios:
Publicar un comentario